viernes, 10 de agosto de 2012

¡Adiós a las 8 horas!

Para los que no vieron la noticia, hagan click aquí

A muchos les puede parecer muy bonito. Descansamos un día extra, trabajando cuatro. 

¡Qué rico, sería un finde largo, siempre! Dirá alguno. Más tiempo para salir y pasear, pensó la otra. 

La jornada 4x3 no es lo que le venden a la gente. De esta forma la empresa podría laborar 24 horas al día, los 7 días a la semana, pagando la jornada normal.

Sí, yo sé que en muchos lugares no se pagan extras. Que en otros laboramos 9 horas y la mayoría no paga las garantías sociales. Es claro que, con nuestra bendición, el patrono, el dueño, el que solo gana a costas de otros, ha ido tomando nuestros derechos y los ha pisoteado. El trabajador, bajo aquel lema de "el que reclama es por vagancia" se ha dejado explotar, sin quejas, dejando la vida en el trabajo.

Hace unos años leí una frase que me marcó, decía: "el ser humano no vive para trabajar, trabaja para vivir". La vida no debe quedar en el trabajo, este debe ser un medio para la superación integral del ser.

Bajo este concepto, la jornada de 4 días laborados y 3 de descanso significaría beneficios para los dueños de la empresa, mientras que para los trabajadores hay tres puntos básicos que analizar:

1) Tiempo para estudio. Un ejemplo. En la U San Cochera, el horario para estudiar Administración de Empresas es: lunes de 18.00 a 21.00, miércoles de 18.00 a 21.00, jueves de 18.00 a 21.00 y sábado de 14.00 a 17.00. Si usted labora en jornada de 8 horas, podría ir todos los días a estudiar, saldría de la U con tiempo para hacer tareas, ir donde la novia y dormir para la jornada de mañana. Sin embargo, si usted trabaja bajo el 4x3 entraría a las 7.00am y saldría a las 7.00pm, de lunes a jueves. Solo podría estudiar los sábados.

2) Pago de horas extra. Actualmente la jornada es de 8 horas, con 4 horas extra. Es decir, se paga tiempo y medio. Si usted gana ¢100 por hora, al final del día tendría ¢800. Si hace las 4 horas extra tendría ¢600 extra. Esto es, ¢150 por hora más. Quiere decir que en una jornada de 12 horas, usted obtendría ¢1400.
Con el modelo 4x3, perdería esos ¢200 extra.

Antes que digan: ¡Pero son solo 2 tejas! Piensen. ¿Cuántos de ustedes han redondeado un buen salario o ahorrado para pagar deudas a punta de extras?

3) Madres o padres solteros. No hay que esconder que este modelo de producción le sirve a las grandes maquilas, tecnológicas o no. En muchas de estas empresas, podemos encontrar a la muchacha joven, sin estudios, que tiene 2 hijos menores en casa. Ellos van a la escuela de lunes a viernes, de 7.00 a 12.45 o14.00, vuelven a la casa y esperan a su mamá, tal vez solos, durante 2 horas. Ella llega, les da  comida, se sienta a hacer tareas y con suerte, la abuelita se los cuida uno o dos días para ella ir a la universidad.
Imagínese ahora estos niños, solos durante 6 horas. Con poca o nula orientación de una persona mayor y madura. 

Así, de nuevo, la crisis la pagamos nosotros. Más rentabilidad para el patrón, dueño de la empresa, menos derechos para el trabajador.


 La unión es vital. Es necesario reivindicar las garantías laborales de las que tanto nos jactamos, derrotar este modelo. Que la crisis la pague el rico.


Para consultas sobre  jornadas diurna, mixta y nocturna: aquí, a partir del artículo 133.






Contacto: